RSS
Write some words about you and your blog here

Perdido en Máncora (Parte IV): Cazando Terramozas

- ¿¿Ooooookeyyyyy; a tu salud Miss Porlles!!!
- No seas tramposo; me has servido más trago a mí que jugo!!
- Vamos Miss Porlles, tú sabes que soy una persona equitativa.

Con un sorbo increíble fomentado por los deseos de libar en celebración del inicio del viaje, Miss Porlles tomó aquel vaso, que estaba lleno de vodka, sin lo necesario del jugo que pueda contrarrestar su efecto. Mi cara de maldad y mis pensamientos de lujuria, festejaban el inicio de la típica consolidación del endemoniado plan, que todo no tan caballero hace.

Fíjese usted caballero, que ya me está recriminando por el primer párrafo, es de cucufatos pensar: “Este es un hijo de puta, “qué basura de persona!!”, o “éste es prospecto de violador”; porque todos sabemos que ese es, también, tu modus operandis.

El plan estaba listo; estaba sirviendo la siguiente copa; el sonido del vodka chocando contra el tomatodo, encendía más mi alegría…

“Señores! Por favor, sírvanse acomodarse, a reclinar sus asientos, porque es hora de la cena. No olviden que el baño estará clausurado hasta que se avise el fin de la cena”- Señaló una voz ya odiada por mi ser, el de la terramoza.

- ¿Qué? ¿¿No se había quedado dormida llorando por todo el chongo??- exclamé sorprendido.
- Pucha… Que nos dejen chupar!! Está bueno el trago!! – Me dijo algo movida Miss Porlles.

Es aquí donde un minipandemoio surgió por habernos sentado casi atrás. La terramoza estaba sirviendo primero a los de adelante, haciendo que nosotros seamos los últimos en ser servidos.

Al inicio no le tomé importancia que me sirvan casi último, total, así tendría tiempo para seguir armando el plan y terminar de ejecutarlo antes que me toque la comida.

Pero la vejiga nunca coordina con el cerebro, y cuando estás en momentos tan decisivos, esta aún quiere imponer dominio con sus intensas pulsaciones en la zona media del cuerpo.

-“Maldita Sea!! Ahorita No!!! Qué hago??”- pensaba mientras apretaba mi descendencia con los abductores.

-“Pero qué carajo voy a hacer!! Si ahorita no se puede usar el baño!! Esta gordita de la terramoza me va a mandar al joraca!!!” (Seguía pensando)

-SIRVEME MÁS!!! – Exclamó Miss Porlles; solicitando que le de una copita extra.

-Esperame un momento!! Me Meo!!!- Le dije por instinto, porque no tenía más que hacer, que ir a saciar mis necesidades físicas.

Corrí hacia el baño que estaba en el primer piso del bus; pero antes de ello, me encontré al principal obstáculo; la mismísima terramoza.
-Señor! Está prohibido el uso del baño durante la cena; vuelva a su sitio!!.
-Señorita! Por favor… le ruego que me disculpe, pero necesito entrar, me urge!!!
- No Señor!! No piensa acaso en los demás!! Cada vez que abra la puerta me va a golpear!! Mire el lugar chiquito en el que estamos.

Efectivamente, el lugar era nimio; la puerta del baño estaba a la entrada del bus, al costado de la despensa donde se guardan todos los alimentos; es decir, en ese lugar, máximo entran 2.

-Ok, está bien, señorita, disculpe…

Me dirigí a las escaleras, subí unos cuantos peldaños, y me apoyé sobre el muro que me lleva al segundo piso del bus; escuché que la puerta que da al camino del primer piso se abría, y luego cerraba; asomé mi cabeza para ver la situación; todo ocurrió como lo planeé; la chica no estaba , había entrado a la cabina donde están los pasajeros del primer piso.

Entonces mi paso estaba asegurado; salté las escaleras, seguido del obstáculo que era el bolsón de comida que la señorita terramoza había dejado en el piso; y al baño.

No hay momento más relajante en la vida que soltar vejiga que está como globo de carnaval; los chorros del líquido suenan a melodías clásicas, y la boca sonríe al pasar los segundos de la expulsión de este. Entiendo que el orinar después de ajustar, es una de las mejores felicidades efectivas inmediatas.

Acabada la expulsión, era hora de salir; entonces, empujo la puerta, pero ni siquiera se movió. “Es común” pensé; es que las puertas del baño son un poco difíciles de abrir. Tras ello, extiendo mis brazos hacia las paredes de la cabina para soportarme hacia ellas, entonces columpio mi cuerpo en el aire, para tomar fuerza en el movimiento. Luego de dos zarandeadas, estoy listo… el último vuelo genera la gran patada doble para abrir la puerta… y…

PLUMMMMMMM!!!!!!!


“UY CHUCHA!!!” – exclamé con sonora preocupación.

La voluminosa terramoza tenía razón. Cada vez que se abría esa puerta, ella era golpeada, y esta vez la gordita salió expulsada hacia la otra pared gracias al impacto. De inmediato me encerré de nuevo. Los golpes efusivos en la puerta no tardaron en sonar.

-“Quién esté adentro salga ya!!!” Gritaba furibunda la mujer. Mientras de mi lado, volví a ejercer fuerza en la cabina, pero ahora con las piernas para jalar la puerta.

Los golpes duraron un minuto más; y se escuchó de nuevo la cabina de la puerta del primer piso; entonces, me animo a abrir la puerta nuevamente, la gordita, se había ido; y mi velocidad de subir al piso, rompió toda marca, si es que alguna vez se ha medido el tiempo de acomodarse en sus asientos en un bus.

-“¿Por qué te has demorado tanto?” - Me preguntó Miss Porlles
- Es un poco largo de contar; ¿No quieres otro trago? – Solté como queriendo retomar el plan.
- No! Ahora me toca a mí ir al baño!!!.
-Pe… pe… pero… no te van a dejar…
- Ah no??? Ya vas a ver!!!

Me quedé petrificado al verla caminar por el pasillo, alejándose de mí, y acercándose a la terramoza. “Seguro regresa” pensé; mientras preparaba más trago, cuando…

“SI NO ME DEJA PASAR AL BAÑO!! AHORITA ARMO EL MAS GRANDE ESCÁNDALO DEL QUE HAYAS PODIDO PARTICIPAR!!! ASI QUE MUEVETEEEE”.

Mis manos temblaron, derramé un poco del jugo que complementaba el vodka; y miré hacia abajo por unos minutos, cuando alcé la cabeza la vi a ella, a Miss Porlles, caminando holgadamente por el pasillo, con sus pechos más altos que los de costumbre; y se acomodó de nuevo.

-Ahora ti! Mash trago, ti??– Me dijo eso con una dulzura extrema.
-Sí….sí…. claro…. – Le serví sorprendido.

Luego ella me contó su hazaña, como pensando que nadie más que ellas dos lo habían escuchado.

Después subió la terramoza, y un nuevo discurso con ella, el cual declamó en sollozos:

“Por favor señores, realmente siempre trato de esforzarme para hacer mi trabajo, pensé que este viaje sería como cualquier otro, pero no lo ha sido como lo esperaba. Señores… tengo una hija que me espera en Máncora… y quiero pasar con ella feliz mi Año Nuevo; pero no lo voy a lograr porque es muy probable que después de esto, me retire; porque parece que ustedes piensan que soy la culpable de que el carro se haya malogrado, pero… no amerita que unos pasajeros a mala fe, vengan a golpearme en la hora de la cena, cuando el baño no se puede usar!!! Y menos que me digan que me van a hacer escándalo…para entrar al baño… Yo tengo dignidad, por favor, espero tengan buenas noches. Gracias”

- Ayayayay… De nuevo está llorando –dijo Porlles.
- Sí pues, no tiene remedio… ¿Un salud más? – Respondí
- Claro, pero sírvete tú también, eh??
- Sí… Sí…claro!!

Luego de ello la terramoza nos entregó nuestra comida, como es de suponer, no lo comimos, puesto que teníamos miedo de lo que podría haber dentro, además que nuestros tápers estaban abiertos.

Y la chupa seguía…


Geniales dibujos por cortesía de: Ni, los invito a ver su genial trabajo en su estupendo blog Ni-Artista; ella está a cargo del departamento de historias dentro del blog, es decir, yo escribo las sonseras, ella se las ingenia para entender lo que escribo y retratarlo. Grande Ni!!

3 comentarios:

Unknown dijo...

en que demonios quedo la historia? no te funcionó tu cosita?

Zhao dijo...

¿El más grande escándalo? jajajaja...

Anónimo dijo...

que pena y por lo menos le diste una disculpa a la terra mostra o no

Unknown dijo...

en que demonios quedo la historia? no te funcionó tu cosita?

Zhao dijo...

¿El más grande escándalo? jajajaja...

Anónimo dijo...

que pena y por lo menos le diste una disculpa a la terra mostra o no